Scones con arándanos

 

 

Hola amigos/as  hoy les traigo una receta que hice hace algún tiempo y que he repetido varias veces porque la verdad es que el resultado es estupendo, son muy ricos y tienen una textura que me encanta, son suaves y delicados y el toque de los arádanos deshidratados ( los cuales nunca probe hasta hacer esta receta) es realmente exquicito. Si no encuentran arándanos se pueden sustituir con pasas o caulquier otro fruto deshidratado de su preferencia, seguro que quedará genial.

 

Esta receta en particular la encontré en el blog  Las mil y una tartas   de mi amiga Claudia . Fué verlos y hacerlos el día siguiente. La verdad es que todo lo que ella  hace me encanta.

 

Sin más preambulos aquí les dejo la receta, espero  que les guste

Un abrazo y feliz semana =) 

 

 

 

 

  

 

Ingredientes:

250 grs. de harina de repostería

1/2 cdita. de levadura Royal

1 pizca de sal

100 grs. de mantequilla fría cortada en trozos.

60 grs. de azúcar

1 yema

90 grs. de nata

 

50 grs. de arándanos deshidratados

Preparación:

1-  En un recipiente, mezclar la harina, la levadura y la sal . Tamizar  e incorporar la mantequilla fría cortada en trocitos (yo lo hice con un tenedor) quedará con aspecto arenoso.A continuación agregar el azúcar y mezclar bien.

2-Incorporar  la yema y la nata y mezclar lo suficiente para que se unan los ingredientes.Por último se añaden los arándanos hasta que se vean bien repartidos por la masa.

3- Es muy importante no trabajar mucho la masa, solo lo imprescindible para unir los ingredientes de lo contrario no tendrá la textura deseada.

4- llevar a la nevera alrededor de una hora.

5- Estirar la masa hasta obtener un grosor de 2cm aproximadamente, cortar con el cortapastas de su preferencia y disponer en una bandeja de horno con papel pergamino guardando cierta distancia. Llevarlos  nuevamente a la nevera para que estén bien fríos.

6- Llevar a horno precalentado a 175-180 ºC durante 20 a 25 minutos aproximadamente.
Yo las pinte con un poquito de yema de huevo antes de meterlas al horno, esto es opcional.

7- Dejarlos  enfriar en una rejilla.

Una vez fríos se cortan por la mitad y se rellenar con un poco de nata montada mezclada con mascarpone o sencillamente se comen así tal cual. A mi particularmente me gustan más sin rellenar acompañando  un buen chocolate o café con leche.